Musée national Picasso-Paris
© Sucesión Picasso, VEGAP, Madrid, 2023
El 18 de enero de 1951 en Vallauris (Francia), Picasso creó la obra Masacre en Corea. A través de esta pintura, el artista expresó su solidaridad con las víctimas civiles norcoreanas que estaban sufriendo las consecuencias de la violencia cometida por el ejército estadounidense durante la Guerra de Corea (25 de junio 1950 – 27 de julio 1953).
Además del título, Picasso no representa eventos específicos de la Guerra de Corea en su obra. En cambio, opta por retratar a los personajes de una manera más general. Los únicos elementos que evocan algo real son el río y las ruinas. El primero divide en dos el cuadro y recuerda la partición del territorio coreano, aún vigente. Las ruinas, por su parte, hacen alusión a la deflagración de Hiroshima.
La pintura, de estilo expresionista, representa un paisaje desangelado, donde los escombros de los edificios destruidos sirven como fondo. En primer plano, se observa a seis soldados que se preparan para ejecutar a un grupo de mujeres y niños. Mientras los soldados aparecen como fríos autómatas de metal, carentes de empatía, las víctimas, completamente desnudas, esperan con resignación el inevitable desenlace.
En este sombrío escenario, un niño demasiado pequeño para comprender la amenaza juega despreocupadamente en el suelo, ajeno al peligro que lo rodea. Una de las mujeres, ubicada en el extremo derecho, muestra una paralizante incredulidad ante la situación. Otra mujer cierra los ojos en una resignada aceptación del destino que se avecina. Dos mujeres más, una embarazada con un hijo mayor que llora aferrado a ella y otra con su recién nacido contra su pecho, reflejan un profundo terror en sus rostros.
La representación de la potencia occidental como un monstruo deshumanizado y destructor condujo a que Estados Unidos considerara esta obra como propaganda comunista durante los años de la Guerra Fría. El Partido Comunista Francés, por su parte, la vio como ambigua en cuanto a la identidad de los verdaderos culpables del conflicto, ya que, según ellos, su representación se alejaba significativamente del realismo socialista. Asimismo, la obra fue recibida con desaprobación por parte de ciertos sectores críticos a nivel internacional, especialmente aquellos afiliados a museos estadounidenses como el Museo de Arte Moderno (MOMA) de Nueva York.
No obstante, el verdadero arte trasciende las limitaciones temporales y geográficas, prevaleciendo sobre las circunstancias efímeras. De esta manera, Masacre en Corea ha perdurado como una obra fundamental de Picasso en defensa de la paz y los derechos humanos.
Como parte de la Celebración Picasso 1973-2023, iniciativa impulsada por los Gobiernos de España y Francia para rendir homenaje a Pablo Picasso en el 50 aniversario de su fallecimiento, el Museo Picasso Málaga muestra esta pintura del 3 de octubre de 2023 al 31 de marzo de 2024 en la exposición El eco de Picasso.
Fuentes:
Museu Picasso Barcelona:
AN-A Fundación:
https://an-a.foundation/el-cuadro-desconocido-de-picasso-masacre-en-corea/