Vida Picasso: Picasso y las palomas

Pablo Picasso, El rostro de la paz, segunda versión 29 de septiembre de 1951. Lápiz litográfico sobre papel reporte, transferido a la piedra. 28,2 x 22 cm. Pertenece al libro 'El rostro de la paz', de Paul Eluard (Éditions Cerclatal Picasso.
Pablo Picasso, El rostro de la paz, segunda versión 29 de septiembre de 1951. Lápiz litográfico sobre papel reporte, transferido a la piedra. 28,2 x 22 cm. Pertenece al libro 'El rostro de la paz', de Paul Eluard (Éditions Cerclatal Picasso.
© Sucesión Picasso, VEGAP, Madrid, 2023

La paloma considerada un símbolo universal de ideas pacifistas a nivel mundial y de armonía entre personas y pueblos, es un emblema que Pablo Picasso ha representado en varias de sus obras, tales como Paloma en vuelo sobre fondo negro (1950), la expuesta en el presente artículo El Rostro de la Paz (1951) o el dibujo utilizado en el cartel del Congreso Mundial de los Partidarios de la Paz que se celebró en la Sala Pleyel del 20 al 23 de abril de 1949 en París.  

Lo cierto es que la figura de la paloma ha estado presente en las obras de Picasso desde sus inicios, influenciado por su padre José Ruiz Blasco, quien era colombófilo y un pintor de corte realista, conocido por sus composiciones de paloma, estudiadas al aire libre (Jiménez Fernández, 2023).  

La utilización recurrente de la imagen de palomas en diferentes obras de Picasso, algunas de ellas adoptadas mundialmente como símbolos universales de paz, es ampliamente conocida y analizada. Y también ha generado controversias, como la que expresa Ilya Ehrenburg (1953): “Los esnobs se burlan de ellas, los malintencionados acusan a Picasso de haber buscado el éxito fácil, no obstante, sus palomas son inseparables del resto de sus creaciones […] la paloma sola no basta para conocer a Picasso, pero solo Picasso podía dibujarla”.  

En adhesión, el mismo autor contextualiza la importancia y significado de las palomas en la obra de Picasso de la siguiente forma: “Hasta hace poco, el nombre de Picasso era bien conocido por artistas, escritores, expertos y amantes de la pintura, así como por esnobs y hombres de mundo temerosos de no seguir las modas del momento. Pero ahora el nombre de Picasso es conocido por millones de hombres sencillos, sus palomas han sobrevolado los cinco continentes del mundo […]. Sin embargo, para que las palomas de Picasso pudieran llegar a millones de personas, eran necesarias muchas cosas: el complejo camino artístico de este hombre, la inmensa maestría por él alcanzada, el conocimiento de los hombres, ligado asimismo a su vida y, finalmente, el artista que, tras haber conquistado la celebridad mundial con una firma que mujeres de banqueros y amantes de ministro han puesto en el punto de mira, se ha dirigido a la gente sencilla” (Ehrenburg, 1953, como recoge Robles Tardío, 2011). 

Las palomas se han convertido en íconos de la obra del artista malagueño, con un significado personal de su propia historia familiar, por también como representación de las causas que defendió, con todos sus matices y complejidad.  

Referencias:  

  • Robles Tardío, Rocio (Ed). (2011). PICASSO Y SUS CRITICOS II. Los años comunistas, 1944-1958. Ediciones de La Central. Barcelona. España.  

  • Ehrenburg, Ilya (1953). Las Palomas de Pablo Picasso. Aparece en: PICASSO Y SUS CRITICOS II. Los años comunistas, 1944-1958. Ediciones de La Central. Barcelona. España. Edición de Rocío Robles Tardío.  

  • Jiménez Fernández, Lourdes. José Ruiz Blasco. Real Academia de la Historia. Disponible en: https://dbe.rah.es/biografias/60144/jose-ruiz-blasco  

  • Picasso, Pablo. Paloma en vuelo sobre fondo negro. 1950. Litografía. Lápiz litográfico, aguada y gouache sobre papel litográfico transferido sobre piedra. Papel: 50,4 x 66,3 cm. Huella: 49,5 x 64,7 cm. Museo Casa Natal Picasso.